Un investigador de la Policía Nacional Civil (PNC) fue asesinado ayer al mediodía en el Cantón y Caserío Bolívar del municipio de Aguilares, departamento de San Salvador.
El agente fue identificado por la Fiscalía General de la República (FGR) como Elmer Bautista, quien estaba destacado en la Unidad de Investigaciones de ese municipio.
A la escena del homicidio se abocó Mauricio Ramírez Landaverde, subdirector de la PNC, quien explicó que el asesinato contra el agente sucedió aproximadamente a las 12:30 del mediodía y fue cometido supuestamente por miembros de la pandilla 18 que opera en el sector. Detalló que un grupo de agentes, vestidos de civil, desarrollaban tareas de investigación en la zona y mientras se encontraban en una vivienda haciendo unos interrogatorios, fueron atacados a tiros por varios pandilleros.
Los agentes intentaron repeler el ataque; sin embargo Bautista falleció en el instante debido a los múltiples impactos de bala que recibió. Tras asesinar al investigador, los pandilleros huyeron y dejaron abandonadas varias porciones de marihuana. Ni su peso ni su valor fueron establecidos; pero se presume que eran para el narcomenudeo en el lugar.
De igual forma, se dijo que el grupo entre cuatro y cinco de pandilleros, atacaron con armas cortas a los agentes policiales. No se reportaron otros agentes lesionados.
A la escena del crimen también llegaron agentes policiales destacados en Apopa, Tonacatepeque y Aguilares y montaron un operativo de rastreo y búsqueda de los asesinos en la zona. Además se hicieron presentes elementos del Grupo de Reacción Policial (GRP), del Grupo Aéreo Policial y al menos una veintena de soldados. Sin embargo no se logró la captura de sospechosos del crimen.
El rastreo se complicó porque las calles son pedregosas y están en mal estado, lo que dificultó el patrullaje en vehículos; también porque la zona es altamente boscosa y permitió que los sujetos se escondieran fácilmente, dijo la policía.
Un poblador de la zona que pidió el anonimato aseguró que el cantón Bolívar es altamente peligroso y asediado por la pandilla 18. Paredes de las viviendas y postes de alumbrado eléctrico del lugar tienen marcas alusivas a esa pandilla.
El poblador manifestó que la semana pasada fue asesinado un miembro de la pandilla 18 a escasos 30 metros del lugar donde ayer fue asesinado el agente policial, mientras que en todo el año se han registrado al menos tres asesinatos en ese cantón.
“Aquí este lugar está bien peligroso con las pandillas. Nosotros tenemos temor que algún día los pandilleros nos puedan matar o nos quieran hacer algo. Lo peor es que en la noche todo este sector es bien solo y es bien raro ver agentes policiales en el cantón”, dijo el poblador.
F.DEM
