El presidente electo, Salvador Sánchez Cerén, anunciará la próxima semana el inicio de un diálogo con diferentes sectores por la seguridad pública. El equipo gestor, testigo y facilitador del proceso sería encabezado por el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, monseñor Gregorio Rosa Chávez, y el pastor del Tabernáculo de Avivamiento Internacional (TAI), Carlos Rivas.
Aparte de los tres representantes de la iglesia, habrá cinco personas más que, según una fuente política, son de reconocimiento a nivel nacional, algunos están relacionados con la firma de los Acuerdos de Paz de 1992.
Ayer, el pastor Carlos Rivas confirmó la existencia del equipo de trabajo y habló sobre las líneas de acción del grupo. De acuerdo con Rivas, el diálogo por la seguridad pública debería convocar a diferentes sectores “vivos” del país como la iglesia, partidos políticos, alcaldes, dirigentes nacionales, locales y a las mismas pandillas.
De entrada, el pastor del TAI aclaró que, en el caso se llamen a las maras al diálogo, no va a significar una negociación con los pandilleros. “Caben los obispos, pastores, medios de comunicación, universidades, educadores, los miembros de las pandillas, o sea, debemos de llegar hasta ellos, no para ir a negociar con ellos, pero sí para generar un clima de confianza, de empatía, de acercamiento que debemos tener con los miembros de estos grupos, de las pandillas”, dijo el pastor.
Rivas insistió en que la comisión va a crear un “diálogo”, no una “negociación”, que no van ofrecer “nada que vaya al margen de la ley”. “Debemos de tener un acercamiento y una sensibilización con estos grupos para darles las oportunidades que nunca han tenido, no hablo de darles cosas al margen de la ley, no hablo de negociar prebendas, sino darles lo que elementalmente con respecto a derecho les corresponde”, declaró.
El dirigente del TAI justificó el posible llamado a los pandilleros en que son ellos los “principales protagonistas de la violencia en este país”. Dijo que un buen acto de buena voluntad puede ser desmontar la violencia.
Aparte de los tres representantes de la iglesia, habrá cinco personas más que, según una fuente política, son de reconocimiento a nivel nacional, algunos están relacionados con la firma de los Acuerdos de Paz de 1992.
Ayer, el pastor Carlos Rivas confirmó la existencia del equipo de trabajo y habló sobre las líneas de acción del grupo. De acuerdo con Rivas, el diálogo por la seguridad pública debería convocar a diferentes sectores “vivos” del país como la iglesia, partidos políticos, alcaldes, dirigentes nacionales, locales y a las mismas pandillas.
De entrada, el pastor del TAI aclaró que, en el caso se llamen a las maras al diálogo, no va a significar una negociación con los pandilleros. “Caben los obispos, pastores, medios de comunicación, universidades, educadores, los miembros de las pandillas, o sea, debemos de llegar hasta ellos, no para ir a negociar con ellos, pero sí para generar un clima de confianza, de empatía, de acercamiento que debemos tener con los miembros de estos grupos, de las pandillas”, dijo el pastor.
Rivas insistió en que la comisión va a crear un “diálogo”, no una “negociación”, que no van ofrecer “nada que vaya al margen de la ley”. “Debemos de tener un acercamiento y una sensibilización con estos grupos para darles las oportunidades que nunca han tenido, no hablo de darles cosas al margen de la ley, no hablo de negociar prebendas, sino darles lo que elementalmente con respecto a derecho les corresponde”, declaró.
El dirigente del TAI justificó el posible llamado a los pandilleros en que son ellos los “principales protagonistas de la violencia en este país”. Dijo que un buen acto de buena voluntad puede ser desmontar la violencia.
Para Rivas, el diálogo que hará el nuevo gobierno tendrá una gran diferencia con el actual pacto con las pandillas. Las conversaciones, dice, será públicas, francas, sin mentiras y, sobre todo, que será reconocido por el gobierno.
“La novedad de esta comisión es que es gubernamental, de alto nivel, de notables, es que hoy tiene todo el respaldo de la Presidencia de la República, es decir, la comisión comienza con algo legítimo, con algo transparente, no lleva otras agendas debajo de la mesa”, reflexionó el pastor.
Ayer, Óscar Ortiz, vicepresidente de la República electo, dijo que el nuevo gobierno tomará como prioridad el tema de la seguridad pública. Sin embargo, aseguró que el “tema de la tregua (entre las pandillas) no es un concepto que vamos a usar”.
“La novedad de esta comisión es que es gubernamental, de alto nivel, de notables, es que hoy tiene todo el respaldo de la Presidencia de la República, es decir, la comisión comienza con algo legítimo, con algo transparente, no lleva otras agendas debajo de la mesa”, reflexionó el pastor.
Ayer, Óscar Ortiz, vicepresidente de la República electo, dijo que el nuevo gobierno tomará como prioridad el tema de la seguridad pública. Sin embargo, aseguró que el “tema de la tregua (entre las pandillas) no es un concepto que vamos a usar”.
F. DEM